En el marco de la pandemia, la Dirección de Estadísticas y Censos se vio obligada a realizar un relevamiento de precios no presencial. Aumentaron en demasía los alimentos.
En marzo, la cifra oficial difundida por el Centro de Estadísticas y Censos porteño indica que el incremento promedio de precios en la Ciudad fue de 2,7%, 0,9 puntos porcentuales por encima de febrero.
El aumento de la inflación se debió principalmente al incremento desmedido e injustificado en los precios de los alimentos que en promedio subieron muy por encima del 2,7% general.
En un contexto donde rige un congelamiento de combustibles y servicios, no existe razón lógica semejante alza en los precios, la crisis humanitaria por la pandemia exige otro tipo de gestos por parte de los sectores alimenticios, más solidarios y menos individualistas.
Retomando con los datos estadísticos de inflación en la Ciudad, computando el 2,7% registrado en marzo, el primer trimestre del año lleva acumulado una suba de 7,2%.
En cuanto a la trayectoria interanual mantiene se mantiene en descenso,
este indicador se ubicó en 44,6%, -1,8 puntos porcentuales por debajo del mes pevio.
La desaceleración de la trayectoria interanual respondió principalmente al menor dinamismo de la tasa de suba de las siguientes divisiones: Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles y Transporte.
Durante marzo la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a las subas en las divisiones: Alimentos y bebidas no alcohólicas, Recreación y cultura, Educación, Comunicaciones y Transporte, que en conjunto explicaron el 63,1% del alza del Nivel General.
Cabe aclarar que en cumplimiento con las medidas preventivas para evitar la propagación de COVID-19, las tareas habituales de campo en su modalidad presencial del IPCBA han sido suspendidas desde fines de marzo.
En consecuencia, se adoptaron e implementaron medios y canales alternativos para el relevamiento de precios: llamadas telefónicas, correo electrónico, páginas web, entre otros.
Respecto los Bienes y Servicios, los Bienes registraron una suba de 2,9%, por encima de los Servicios que aumentaron 2,6%.
La dinámica mensual de los Bienes respondió principalmente a los incrementos en los precios de los alimentos (especialmente de las carnes, de las verduras y de los lácteos). Le siguieron en importancia las prendas
de vestir, de los medicamentos y de los cigarrillos.
En tanto, el comportamiento de los Servicios reflejó fundamentalmente los aumentos en las cuotas de los establecimientos educativos de enseñanza formal y el arrastre que dejó el incremento en la tarifa de taxi que entró en vigencia en febrero.
Así, en el primer trimestre del año los Bienes acumularon un alza de 7,2% y los Servicios de 7,1%. En términos interanuales, ambas agrupaciones se desaceleraron hasta: 53,7% en el caso de los Bienes y 37,2% i.a. en el caso de los Servicios.
Para mejorar las estadísticas mientras dure la pandemia, se desarrolló la aplicación “Cargá tu compra” para que los consumidores puedan colaborar e ingresar los precios de una selección de productos con el objetivo de recolectar más información y poder monitorear lo relevado.
